Había un hombre con cuatro hijos. El buscaba que aprendieran a no juzgar tan rápidamente, de modo que los envió en diferentes estaciones del año a ver a un árbol de peras.
El primero lo vió en invierno y cuando regresó comentó que se trataba de un árbol seco y torcido.
Pasión. Estoy muy feliz al comprobar que ahora las historias por capítulos las escribes de una sola vez.
¿Te acuerdas de los tres caminos?.
Besos.
Jaja!!!
Los tres caminos los escribió Hada!! jajajaja!! Sí, me acuerdo... allí, creo, fue tu primera visita!!
Un abrazo!!
Pasión
Es posible, vaya casi seguro aquella primera visita. Tan lejana en el tiempo y tan fructífera, por lo menos desde aquí.
Un beso